Doña Marina 12 años de voluntaria en EUDES, adultos con VIH, una soldada de Dios que siempre ha sentido su misión de servicio a los enfermos.
Paola, voluntaria que dinamiza los grupos y les facilita compartir a pesar de sus altas limitaciones físicas.
Martha, en la charla sobre la relación con Dios y nuestra FE frente a la vida como enfermos terminales cada vez más limitados pero con más posibilidades de crecer espitirualmente.
Carlos y Juliette los músicos del alma, sensibilizandoles hacia la vida con Dios.
Nubia ofreciendo alimento bendito, ésta vez, yogurt casero con frutas, algunos no lo habían probado núnca.
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